La biblia es
el libro más estudiado, más traducido, más publicado y más re versionado de la
historia, y por estos hechos el libro que más ha influido en el mundo
occidental, y ha influido hasta en la vida de aquellos que no cree en ella.
Sobre la
biblia se ha jurado en falso muchísimas veces, por malinterpretar la biblia se
han generado horribles matanzas,
Por
manipular los dichos de la biblia se han realizado las peores atrocidades y
abusos.
¿Qué tiene
de bueno entonces?
Las cosas
malas que ha generado la biblia no son comparables a la cantidad de cosas
buenas que también ha generado, pero entonces ¿qué es lo que sale mal?
Bien la
biblia es un libro que no debe ser explicado sino entendido, la biblia es clara
y concisa, debemos ver la biblia en contexto y como y porque se escribió lo que
se escribió, las partes proféticas y las que no lo son.
Los hombres
que la escribieron quienes eran, porque lo escribían y que parte tenían en
ello.
Cada persona
tiene la capacidad de leerla y entenderla, la dedicación y el interés que se
pone en ello es lo que hace la diferencia.
Si la
palabra de Dios tal como se la denomina es una sola, ¿por qué hay tantas
diferentes interpretaciones?
Porque los
hombres hacen estas interpretaciones en función de sus necesidades sin importar
lo que realmente es el sentido que la biblia da a esas frases.
Los
intereses creados, los gustos personales, hasta como manejamos nuestro dinero,
según se ve todo es de libre
interpretación.
Si Dios
quisiera hablarnos de como desea que le sirvamos, ¿lo dejaría a libre
interpretación?
Si usted da
instrucciones a alguien para que efectuara un trabajo importante ¿sería vago o
impreciso?¿dejaría al azar detalles importantes? No lo creo, Dios tampoco haría
eso, la biblia es un libro franco para una lectura sencilla, no es algo a
interpretar es liso y llano. Compruébelo, no espere que alguien le diga que
pensar ni que hacer, hágalo usted mismo Dios nos habla a cada uno mediante la
biblia y es demasiado claro, los que no lo son, son los líderes religiosos que
nos manipulan diciéndonos precisamente que hacer, que pensar, y como demostrar
nuestra fe.